Título: 127 hours
Reparto: James Franco, Kate Mara, Lizzy Caplan, Clémence Poésy
Sinopsis: 127 horas es la verdadera historia del alpinista Aron Ralston (James Franco), una extraordinaria aventura de supervivencia donde el protagonista debe salvarse a sí mismo después de que una piedra se estrellase contra su brazo atrapándole en un cañón aislado de Utah. Durante los próximos cinco días, Ralston examina su vida y sobrevive a las adversidades para descubrir finalmente que tiene el coraje y los medios suficientes para liberarse a sí mismo.
Crítica (por Marcelo Caldera de La Cárcel de Carpenter):
"Esta roca me ha estado esperando toda mi vida"
Aunque no tiene el mismo nivel de grandeza que su anterior film (Slumdog millionare) Danny Boyle triunfa en contarnos una historia que nos atrapa, con un solo personaje en todo el film.
Mantener en el borde de su asiento al público siempre ha sido difícil, hacerlo cuando el escenario de inicio a fin es un tipo atorado a una roca, es todo un arte. Claro que la premisa puede asustarlos un poco. Cualquiera la piensa dos veces al entrar a ver un film que de antemano se sabe tiene una historia simplista, el publico estos días pide explosiones y conflictos más grandes que la vida. Pero son cintas como esta las que demuestran que no son necesarios para relatar una historia cautivadora.
Boyle no exagera ni en la sangre ni en el melodrama, se mantiene en un borde correcto y en vez de explotar el lado claustrofóbico de la situación (a como es obvio) nos quiere mostrar lo que sucede en la cabeza de una persona cuando está en esa particular encrucijada, la forma en que comienza a dar vuelta su cerebro; Y es ahí donde el cineasta sale airoso, porque para tratar este tema usa de polea un sin número de imágenes, el intenta contar lo que piensa el personaje no atravez de palabras sino por las diferentes cosas que entran en su mente por culpa de la sucesión de ideas ¿tiene sed? Entonces Boyle presenta una secuencia que sigue todo e camino desde el risco donde está atrapado hasta su camioneta donde guarda las gatorade, lo que sigue después son varias imágenes de líquidos que se ven bastante refrescantes; hasta ese momento, James franco no ha abierto la boca. Pero tu captaste el mensaje. Otra de las razones del éxito de las cintas es claramente James Franco. No cualquier actor tiene la habilidad de llevar toda la película en sus hombros, hablamos de que por mayor parte del metraje su rostro y su interpretación será lo único que veremos. Pero Franco ha demostrado en veces anteriores su habilidad artística mas allá de ser “el amigo de Peter Parker” aunque hasta el momento solo ha tenido papeles pequeños, James brillo en cintas como Milk o Pineapple Xpress. Esta era su oportunidad de lucirse al máximo y lo ha logrado. Ay una escena en particular a los días del fatídico suceso donde ya en medio de la desesperación Aaron comienza ha hacer un monologo o más bien una conversación con el mismo (¿o con un entrevistador?), que es simplemente brillante. De una manera tétrica, muestra como su cordura y su tranquilidad hasta el momento se están esfumado y al mismo tiempo reflexiona sobre los errores que lo llevaron a su actual predicamento. Nada ortodoxo pero un genial transporte para la genialidad de franco en el papel.
La película es frenética, después de todo estamos siguiendo a alguien que vive su vida en constante movimiento. También es aislante y cerrada en momentos, el jugar con las imágenes le permite adentrarse en conceptos visuales interesantes, mostrarnos las escenas desde otra perspectiva y de esa forma aumentar el interés de las mismas. Una simple hormiga se vuelve punto fuerte del escenario o una mirada perdida nos indica lo que ocurre en ese momento. Sumando un final bastante chocante, no se nos deja tomar un descanso por mucho tiempo.
Danny Boyle lo logra de nuevo. Y a como es de esperarse esto le abrirá la puerta cientos de premios de diferentes medio y lugares. Según yo todos los que le lleguen tanto a el como a James Franco, están más que merecidos.
0 comentarios:
Publicar un comentario